Tristeza

NO. No pienso dejarme ganar por este sentimiento de tristeza inmensa que amenaza a diario con engullirme.

Cada vez es más difícil y distante la relación con R, no tenemos nada de que hablar, nuestras conversaciones se limitan al tiempo y al estado físico de él.  Me siento abandonada, olvidada.

Necesito sentirme querida, deseada, quizá admirada... puede ser que sea una estúpida, una niña ñoña que no es consciente de la realidad... pero es que yo creo que R no siente por mi el tipo de amor necesario en una relación de pareja y yo no sé si soy su hermana, su madre, o qué...

Lo peor de todo es que lo que yo sentía ya sólo es un recuerdo y hoy por hoy lo único que queda es un contrato que yo, por principio, no voy a romper.   Quizá es una forma de hipotecar mi vida, pero tengo a mis hijos, mi trabajo..., qué más da que en lugar de marido tenga una persona que no sé cómo calificar?