Siete años

Siete años de mi vida en los que he dejado de ser yo, en los que he olvidado hasta lo más evidente, siete años cubierta por una nube negra permanente que no dejaba que los rayos del sol me llegaran…

 

Durante unos meses, mi primer pensamiento al levantar y el último antes de dormir ha sido que un viento huracanado alejara de mi de esa horrible nube que sólo hacía que descargar sus rayos sobre mí… Finalmente el universo recibió mi señal y por una serie encadenada de cosas que, en principio, no tienen ninguna lógica ni deberían de haber sucedido, mi deseo se hizo realidad…

 

Ya está hecho lo más difícil, ya hemos reordenado los armarios, recogido las fotos… ya me quité la alianza… ahora toca mirar hacia delante, levantar la cabeza, hombros atrás!!! Y marchar con paso firme y decidido allí hacia donde el corazón me lleve…

 

Sé que, como me han dicho últimamente varias veces, soy demasiado confiada, creo en el buen fondo de la gente pero no quiero dejar de ser así, a pesar del dolor que ello pueda causarme… Mil veces prefiero recibir una puñalada por la espalda que me dolerá mucho, muchísimo, a estar mirando por encima del hombro, desconfiando hasta de mi sombra, porque de esa manera puedo perderme algo importante, puedo dejar pasar algo o a alguien que tenga algo para mí…

 

Es una filosofía arriesgada, lo sé, lo he sufrido y seguro que volveré a sufrirlo pero vale la pena…con sólo una vez que reciba un rayo de sol, de alguien que se cruce en mi vida, será un regalo y  se habrán compensado todas las tormentas que haya podido soportar…