Libre!!!!

Libre!! Por fin soy libre!!!

Como el viento, como los pájaros, siento que puedo volar y reir, que vuelvo a ser yo misma... Rosa, esa Rosa que hace meses estaba perdida y que, yo en mi angustia, creí que jamás volvería a resurgir...

Las últimas cosas que he sabido y que además he corroborado se han llevado, como si de un viento huracanado se tratara, cualquier atisbo de sentimientos... culpabilidad, lástima, cariño, ternura y por supuesto amor, que se habian atascado en mi corazón y me impedían cerrar el capítulo...

Ahora, definitivamente, se han roto las cadenas y ni Joaquín Sabina es capaz de resucitar en mí la nostalgia... Lo mejor de todo es que no he cambiado el signo de los sentimientos y tampoco me ha quedado rencor, ni necesidad alguna de venganza... NADA, maravilloso!!!!

Me quitaron la venda, mejor dicho, me la arrancaron de los ojos y me dejaron al descubierto una realidad cruel y dolorosa, una realidad en la que me he visto como una herramienta a la que han manejado y manipulado con un único interés... poder seguir viviendo en ese mundo escondido y oscuro del que, evidentemente, jamás podía yo haber tenido noticias... 

Realmente es preferible vivir en ese inframundo que en el que vivo yo???? La verdad es que la respuesta me es absolutamente indiferente.

He vuelto. Estoy aquí,  me siento feliz y voy a aprender a bailar la danza del vientre!!!!!!