Lo siento

Hace algunos días mencioné que tenía pendiente pedir disculpas por un post que dediqué a Juan.

Hoy es el cumpleaños de nuestro hijo y es un buen momento para hacerlo.  Lo siento.

En estos últimos tiempos me he ido desprendiendo de un montón de sentimientos que estaban atascados dentro de mi y de alguna manera aprisionaban mi alma... uno de ellos era el odio irracional que sentía por Juan.

Es cierto que mientras duró nuestra relación fui feliz con él, siempre fue considerado y tenía pequeños detalles que me hacían sentir importante, me contaba historias mitológicas antes de dormir como si fueran cuentos... Es curioso... Ahora estoy mirando nuestra relación desde el lado absolutamente opuesto al post de hace unos meses... desde el lado positivo!!!

Ayer tuvimos una pequeña conversación y llegó a removerme el corazón... pude recordar momentos inolvidables, lugares, situaciones y en honor a la verdad tengo que decir que aunque no seamos compatibles como pareja Juan no es una mala persona.

Aunque tu no leas esto, aunque no seas consciente de todo lo malo que he dicho de ti, aunque nunca hayas llegado a sentir del todo el odio que me inspirabas, yo me quedo mucho más tranquila limpiando mi alma y mi conciencia haciendo saber a todo el mundo que todos nos equivocamos y que en el fragor de la batalla legal que mantuvimos hace años, todos esos buenos momentos que ayer regresaron a mi memoria, quedaron ocultos por un manto negro de soberbia, desprecio y deseos de victoria, que también he de admitir, que no son buenos para nada...

Lo siento, Juan. Y ... gracias... gracias, porque tu eres el 50% responsable de la existencia de mi tesoro Daniel.