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Diario de una secre

Recordando

Recordando

Ayer me pidieron que recordara todo lo bueno que he conseguido en mi vida...

Estoy pensando en ello desde ese momento y lo único que puedo decir con toda certeza que es, no sólo bueno, sino lo mejor que he conseguido en mi vida,  son mis hijos: Rosa y Daniel.

He intentado pensar en mi vida desde pequeñita y algo hermoso que imagino como una postal de cuento, es a mi misma comiendo galletas de coco bajo un limonero, pintado de blanco el tronco y un montón de hormiguitas negras corriendo arriba y abajo... ese lugar ya no existe... era el patio de la casa de mi abuela en Sevilla y la niñita de tres ó cuatro años feliz, también se fue.

Después del patio con olor a azahar, no sé si porque en mi cabeza hay tantas cajas cerradas a cal y canto que he olvidado en cual de ellas está eso que busco ahora, o porque sencillamente no hay nada más, no soy capaz de añadir a la lista ninguna otra cosa.

Bueno!!!, no voy a ser negativa al cien por cien... siempre he tenido buenos trabajos que me he ganado por mi misma, sin enchufes, ni padrinos, eso es verdad... también lo es que me he esforzado mucho por llegar a tener una formación que me permitiera pretender esos puestos y que todo ello lo he aprendido desde la práctica, a veces exagerando el curriculum y confianzo en mi misma y mi capacidad de aprendizaje... por suerte siempre salió bien!!!

Por lo demás, yo que pensaba que tenía dos AMIGOS, aunque muchos conocidos, ha resultado ser que no tengo NINGUNO.

Según mi concepto de la amistad, para copas y risas todos son amigos, pero en las dificultades, las lágrimas, los miedos y todas esas cosas que no son divertidas es donde los amigos de verdad, esos de las mayúsculas, están y ni siquiera hace falta que les llames, pues de esos nada, nada de nada.

Acabo de releer toda esta parrafada y me he dado cuenta que no he incluido nada material, no es porque no lo haya conseguido, que sí lo he hecho, yo solita además, con mi esfuerzo y mi trabajo, pero eso... para mi no tiene valor, cuando me muera ni el coche, ni la casa, ni nada de nada se vendrá conmigo.   Siempre he dicho y lo creo firmemente, que en esta vida, las cosas importantes, las imprescindibles, son todas aquellas que no se pueden contar, medir ni pesar... y de esas, sólo tengo las que me dan dos criaturas que son las más importantes de mi vida y tienen nombre: Rosa y Daniel.

1 comentario

MARTA HIJA DE PILUCA -

es verdad m pareces una mujer muy valiente con par lo q hoy se llama una mujer con un par de cojones felicidades por ser como eres