Unforgettable

Inolvidables tus besos apasionados a la luz de la luna, escondidos en un rincón de aquella terraza que parecía el Amazonas, inolvidables los buceos a través de las burbujas del cava, inolvidables nuestras conversaciones hasta la madrugada, inolvidables nuestras noches de amor, de pasión desconocida, irrepetibles aquellas carreras alrrededor del sofá con el único fin de caer rendidos uno en bazos del otro y recuperar el aliento bebiéndolo de los labios del otro

Inolvidable, ciertamente. Esta es una de las pocas veces que mi cabeza no tiene nada que ver con las letras que mis dedos van buscando en el teclado.

Sólo quiero gritar a los cuatro vientos, al universo entero, que te amaba, que te amo y sólo Dios sabe hasta cuando durará esto, yo soñaba con que fuera para toda la vida, pero este sueño se quedó en pesadilla por el camino.

Por suerte y como siempre me repito, sonrío por lo que tuve y aunque duele la pérdida (y  no poco) las heridas se cierran y sólo te acuerdas de ellas cuando cambia el tiempo. 

Lo que es tan cierto, como que me llamo Rosa María es que daría la vida entera por volver el tiempo atrás y hacer que todo hubiera sucedido para que el sueño no se acabara nunca.

Lamentablemente, sólo Superman tiene el poder de volver el tiempo atrás.