Soplo de vida

Estás ahí, verdad?

Sé que lo estás, lo intuyo, lo siento... me lees y cada día esperas encontrar una nueva historia que te acerque o que te aleje, realmente eso es lo de menos... sólo quieres saber que estoy.

Para quien son estas palabras?? para tí? o quizá para tí?

Eso sólo lo sé yo.

Mujer fuego, me ha llamado mi fantasma... ha apelado a mi vitalidad y me ha dicho que no debo permitir que ningún ser vivo me aleje de mi camino...vuela, me ha dicho, vuela que para eso te enseñé a volar sin alas...

Ha venido a sacudirme la tontería y me ha devuelto a la senda de la que no debo salir y de la que en estos últimos días me había alejado demasiado, ensimismada como estaba en mi propio dolor... a veces olvido que nadie debe tener el poder de jugar con mi ánimo, yo soy la dueña de mi vida, de mi corazón y no puedo permitir que los recuerdos, por amargos que sean, tengan el poder de hacerme prisionera para convertirme en alguien que no soy... no estoy dispuesta a someterme a la tortura de abandonarme, de no luchar...

Me siento orgullosa de ser quien soy, de ser como soy y por poca confianza que me quede no voy a hacer como las avestruces... no esconderé la cabeza, no seré cobarde, porque si lo fuera dejaría de ser yo, dejaría de ser la madre de mis hijos, dejaría de ser... sencillamente, dejaría de existir y no quiero convertirme en un envase vacio.

Mi alma ha volado con el soplo de mi fantasma, se ha sacudido, se ha desperezado y ha vuelto, de nuevo, coloreada de pasión.